¿Cómo hacer conserva de tomate?

Cómo hacer conserva de tomate: todo lo que necesitas saber

¿Tienes muchos tomates y no sabes qué hacer con ellos antes de que se echen a perder? Una opción muy recomendable es hacer conserva de tomate. De esta forma, podrás disfrutar de su sabor durante todo el año y además te asegurarás de que no se estropeen.

En este artículo te explicaremos cómo hacer conserva de tomate paso a paso, así como algunos consejos para que te quede perfecta.

¿Qué necesitas para hacer conserva de tomate?

Para hacer conserva de tomate necesitas los siguientes ingredientes y utensilios:

• Tomates maduros: es importante que los tomates estén en su punto óptimo de maduración para que tengan más sabor. Necesitarás al menos 1 kg de tomates para hacer conserva.
• Botes de cristal con tapa hermética: es importante que los botes estén en buen estado y que tengan una tapa que cierre bien para evitar que entre aire y se estropee la conserva. Lávalos bien con agua y jabón antes de usarlos.
• Olla grande: necesitarás una olla lo suficientemente grande como para que quepan los botes de cristal.
• Cuchillo: para cortar los tomates.
• Cucharón: para llenar los botes de cristal.
• Sal: para potenciar el sabor del tomate.
• Azúcar: opcional, para equilibrar la acidez del tomate.

Pasos para hacer conserva de tomate

1. Lava los tomates con agua y sécalos con un paño limpio. Retira el pedúnculo (la parte verde) con un cuchillo y córtalos en trozos pequeños.
2. Pon los tomates en una olla grande y añade sal al gusto. Si quieres, también puedes añadir una cucharadita de azúcar para equilibrar la acidez del tomate. Remueve bien.
3. Pon la olla a fuego medio-alto y espera a que los tomates empiecen a soltar su jugo. Remueve de vez en cuando para que no se peguen.
4. Cuando los tomates hayan soltado suficiente jugo, baja el fuego y deja que se cocinen a fuego lento durante unos 30-40 minutos, removiendo de vez en cuando.
5. Mientras tanto, lava los botes de cristal con agua y jabón y sécalos bien.
6. Cuando los tomates estén cocidos, tritúralos con una batidora de mano o un pasapurés hasta que queden bien finos.
7. Con la ayuda de un cucharón, llena los botes de cristal con el tomate triturado, dejando un poco de espacio libre en la parte superior para que no se salga al cerrarlos.
8. Cierra los botes de cristal con la tapa hermética y ponlos en una olla grande. Añade agua hasta cubrir los botes por completo.
9. Pon la olla a fuego medio y deja que los botes de cristal se cocinen durante unos 40-50 minutos, dependiendo del tamaño de los botes. Es importante que el agua esté caliente pero no hirviendo para evitar que los botes se rompan.
10. Pasado este tiempo, saca los botes. Después de pasado el tiempo de cocción, saca los botes de la olla con cuidado utilizando una pinza y colócalos en una superficie plana. Deja que se enfríen por completo antes de manipularlos o almacenarlos.
12. Una vez que los botes estén fríos, verifica que las tapas estén abombadas y no se muevan cuando las presionas con el dedo. Esto es una señal de que la conserva se ha sellado correctamente y se puede almacenar sin problemas.
13. Si encuentras algún bote con la tapa hundida o que se mueve al presionarla, significa que no se ha sellado correctamente. En este caso, deberás consumir la conserva en un plazo de una semana o bien, almacenarla en el frigorífico si quieres que dure un poco más.
14. Recuerda que las conservas caseras pueden durar hasta un año si se han sellado correctamente y se han almacenado en un lugar fresco y oscuro. Una vez que abras un bote, deberás consumirlo en un plazo de 2 a 3 días y almacenarlo en el frigorífico.